martes, 11 de mayo de 2010

La mochila

Tengo que admitir que, con la ilusión de hacer el Camino, la búsqueda de información en diferentes webs, definir las etapas que voy a hacer, elegir la fecha en la que empezar,etc, no me he parado a pensar que a lo mejor físicamente no soy capaz de completar los kilómetros que me lleven a Santiago.

Es cierto que en la charla del otro día en la Asociación de Madrid, el hospitalero nos dijo que no nos preocupásemos, que no era duro, y que se hacía sin problemas, si bien es cierto que habló de ampollas y demás complicaciones inherentes a la realización del camino.

Sin embargo, ahora que se acerca la fecha de salida hay dos cosas que me preocupan, y mucho, por mi espalda y que me hace no tener del todo claro que sea capaz de terminar el Camino.

La primera son los colchones donde voy a dormir en los albergues; así, me veo cada mañana haciendo el moro para estirar, tirado en el suelo debajo de las literas, lo cual va a llamar la atención ligeramente a la gente con la que haya dormido esa noche. Aún así confío en que pueda descansar algo para arrancar cada mañana.
(Este tema de las literas me ha recordado una conversación que tuve el otro día con la gente de clase tomando una coca cola en Santa Barbara. Me preguntaban si en los cuartos con literas dormían hombres y mujeres juntos. Admito que no supe responder. Por lo que he podido leer en los foros, me da en la nariz que en el camino la gente duerme donde buenamente pueda, también es cierto que se refieren sobre todo a los meses de julio y agosto. En cualquier caso la primera noche en Sahagún saldremos de dudas. Ya os contaré)

La segunda cuestión que me preocupa es andar con el peso de la mochila . Aquí todo el mundo se pone de acuerdo y repite sin cesar la misma idea, "tu haces la mochila, y cuando hayas terminado, la vuelves a vaciar y metes solo la mitad de lo que habías metido originariamente". Hay gente que incluso llega a afirmar que lo único que necesitas es la credencial, el dni y una tarjeta de crédito; sobre todo en el Camino Francés, que es el que voy a hacer yo, en el que por lo visto hay mucha gente y cada pueblo que se cruza tiene de todo. Así la mochila no debe pesar más de 7 kilos y no contener ningún artículo innecesario, incluido comida que puedes ir adquiriendo en los pueblos.

En cuanto a la configuración de la mochila, que ahora pasaré a detallar querría dar las gracias a Gus-Endeso que me ha ayudado mucho prestándome algunas cosas y asesorándome en qué debería llevar. Ahí va mi lista, por si algún día le puede servir de ayuda a alguien:

Mochila: ligera y anatómica.
ROPA
Botas de Treacking.
3 Camisetas de algodón. 2 Pantalón desmontable. 3 mudas.
3 Pares de calcetines. 1 Jersey: no demasiado grueso. Capa de lluvia.
Chaqueta.Toalla pequeña.
Saco de dormir. Chancletas para la ducha y después de la caminata.
Esterilla. Bañador. Gorra.gafas de sol
BOTIQUÍN
Alcohol de romero, gasa, esparadrapo de seda,
Rollo de papel higiénico,betadine, tiritas,
6 Pinzas de tender ropa,crema para el sol. Aguja e hilo, tijeras pequeñas. Parches Compeed,Vaselina, aspirinas. tapones para dormir
NECESER
Cepillo de dientes, pasta de dientes, un bote de gel, peine,pastilla de jabón Lagarto. crema para el sol
OTRAS COSAS
Navaja multiusos, mechero, frontal.
Candado pequeño
Camara de fotos.Ordenador. Teléfono
Credencial del Peregrino.DNI.Cartilla de la Seguridad Social.
Dinero en efectivo y tarjeta de crédito.

A pesar de la ayuda de Gustavo, hay algunas cosas que he tenido que comprar. El pasado viernes me fuí a una tienda de deportes y allí encontré todo lo necesario, me hizo gracia porque incluso tenían un apartado que habían titulado "El rincón del peregrino" donde adquirí lo que me faltaba. Me gustaron especialmente unos pantalones "desmontables" que dan una apariencia de Indiana Jones que no sé si voy a dar mucho el cante por mitad de Astorga. Además me compré unas botas bajas de trecking impermeables que por lo que he leido van a ser de lo más importante del camino.

Hoy las he estrenado, la recomendación que te hacen todos los peregrinos que he conocido es que ni se me ocurra ir con zapatos nuevos. Me he dado un buen paseo Arturo Soria para arriba, Arturo Soria para abajo, para que el pie se vaya haciendo al zapato y evitar así, en la medida de lo posible, las temidas ampollas.

Además he ido al peluquero para que dentro de tres semanas cuando llegue a Santiago no tenga mucha pinta de facineroso que diría mi madre.
Digna de mención la cara del peluquero cuando me miraba los zapatones que llevaba.

PD:Prometo contaros el domingo qué me llevo finalmente, cuánto pesa y subir fotos de todo.

1 comentario:

  1. Recuerda que tu camino comienza desde tu puerta, pero no se termina ni con la vuelta! Yo lo único que quiero añadir es que tengas una buena estación de penitencia. Es curioso que mientras mi hermano mayor hace el camino de Santiago haga yo el del Rocío. Será una coincidencia o serán los astros? Espero que nos sirva para encontrarnos con nuestro yo interior. Tu tendrás más días para ello; yo, sin embargo, tendré que encontrarme antes del 5º botellín de cruzcampo, porque después a ver quien es el guapo que me encuentra. Bueno, que disfrutes la experiencia que comentan todos los peregrinos! Me quedaré aquí intentando levantar el pais. PD: Me gusta salir de Sevilla y meterme en las arenas! jab

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